El presidente de EE.UU. firmó una orden ejecutiva que impide el ingreso de personas provenientes de naciones como Afganistán, Irán, Haití y Somalia, e impone restricciones parciales a países como Cuba, Venezuela y Laos. La medida, que entrará en vigor el 9 de junio, ha generado críticas por su carácter discriminatorio y por los posibles impactos en comunidades migrantes.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el 4 de junio de 2025 una orden ejecutiva que reinstaura y amplía su controvertido veto migratorio de 2017. La nueva medida prohíbe completamente la entrada al país de ciudadanos de 12 naciones y establece restricciones parciales para otros siete países. La proclamación entrará en vigor a las 12:01 a.m. del lunes 9 de junio.
Países con prohibición total de ingreso:
- Afganistán
- Birmania (Myanmar)
- Chad
- República del Congo
- Guinea Ecuatorial
- Eritrea
- Haití
- Irán
- Libia
- Somalia
- Sudán
- Yemen
- Países con restricciones parciales:
- Burundi
- Cuba
- Laos
- Sierra Leona
- Togo
- Turkmenistán
- Venezuela
Según la proclamación oficial, la decisión se basa en preocupaciones de seguridad nacional y en la necesidad de proteger al país de amenazas terroristas y otros riesgos para la seguridad pública. Trump argumentó que varios de estos países no cumplen con los estándares de verificación de identidad y tienen altas tasas de personas que exceden la duración de sus visas .
La medida ha generado críticas por parte de defensores de los derechos civiles y legisladores demócratas, quienes la califican de discriminatoria y perjudicial para las comunidades inmigrantes en EE.UU. La representante Pramila Jayapal expresó que la política “limita la inmigración legal y es perjudicial para nuestra economía y comunidades que dependen de las contribuciones de personas que vienen a América desde una amplia gama de países” .
Además, la orden ejecutiva incluye excepciones para residentes permanentes legales, personas con visas válidas, atletas que participen en eventos internacionales como los Juegos Olímpicos o la Copa Mundial, y aquellos que puedan demostrar que su ingreso es de interés nacional para EE.UU.
La implementación de esta política revive las restricciones de viaje impuestas durante el primer mandato de Trump, las cuales enfrentaron desafíos legales pero fueron finalmente respaldadas por la Corte Suprema en 2018. Se anticipa que esta nueva medida también será objeto de litigios en los tribunales.
La administración Trump ha indicado que la lista de países afectados podría ser revisada y ajustada en función de mejoras en los protocolos de seguridad y verificación de identidad de cada nación.