El Gobierno nacional oficializó este lunes el cierre definitivo del programa Procrear, a través de la resolución 764/2025 que ordena la liquidación de su fondo fiduciario. Como alternativa, promueve las nuevas “hipotecas divisibles”, un instrumento financiero pensado para desarrollos privados. Las obras en marcha quedarán bajo la órbita de provincias y municipios, mientras crece la incertidumbre sobre el futuro de miles de viviendas sin finalizar.
Cierre formal y transferencia de activos
Mediante la resolución 764/2025 publicada en el Boletín Oficial, el Ministerio de Economía dispuso la liquidación total del Fondo Fiduciario PRO.CRE.AR, transfiriendo esa tarea a la Secretaría de Obras Públicas. Por su parte, el Banco Hipotecario continuará administrando los créditos otorgados, respetando las condiciones originales.
En cuanto a los inmuebles aún sin uso urgente, muchos de los cuales estaban destinados a alquileres sociales, serán traspasados a la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), según lo establecido por el decreto 1018/2024.
Hipotecas divisibles: solución de mercado
En paralelo, el decreto 1017/2024 introdujo el concepto de “hipotecas divisibles”, que permiten separar deuda y garantías sobre partes de una propiedad. Esta herramienta facilita el financiamiento de desarrollos inmobiliarios privados, y marca un giro hacia el protagonismo del sistema bancario comercial como motor del crédito habitacional.
Obras en construcción: coordinación federal
Según estimaciones publicadas por Infobae, unas 17.000 viviendas Procrear continúan en ejecución. Su finalización dependerá de la voluntad política y capacidad financiera de provincias, municipios o incluso desarrolladores privados. Algunos distritos, como Avellaneda y la provincia de Buenos Aires, ya asumieron la continuidad de obras con fondos propios.
Auditorías y reestructuración
Auditorías de la SIGEN detectaron irregularidades, demoras y deficiencias constructivas y contables, lo que aceleró la decisión de disolución. El Banco Hipotecario será responsable de las cobranzas de créditos vigentes y el Estado podrá vender carteras con bajo rendimiento financiero, como parte del plan de liquidación.
Contexto político y debate
El programa Procrear fue lanzado en 2012, durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, y llegó a otorgar más de medio millón de créditos para construcción, refacción y acceso a viviendas. Su cierre, anunciado por el vocero presidencial Manuel Adorni en noviembre de 2024, responde a la política de “Estado mínimo” que impulsa Javier Milei.
El anuncio fue duramente criticado desde la oposición. El gobernador Axel Kicillof advirtió que “quedan abandonadas miles de viviendas” y cuestionó que “el acceso a la vivienda quede en manos del mercado”. Desde el oficialismo, en cambio, defienden el cierre al considerar que “la construcción estatal es ineficiente y costosa” y que “la banca privada puede asumir ese rol con mejores resultados”.
¿Qué impacto tendrá realmente el cierre del Procrear?
Tema Implicancias
Vivienda social El Estado cede protagonismo al mercado y gobiernos locales; riesgo de paralización de obras en curso.
Créditos Se mantienen los actuales, pero desaparece el acceso estatal a préstamos con tasa subsidiada.
Finanzas públicas Reducción del gasto mediante venta de activos; ahorro fiscal para el Tesoro.
Equidad habitacional Mayor dependencia del mercado: riesgo de exclusión para sectores vulnerables en un contexto inflacionario.
El fin del Procrear marca el cierre de una etapa de fuerte intervención estatal en políticas habitacionales. El nuevo modelo apuesta a la descentralización y al crédito privado, pero el verdadero desafío será evitar que la transición profundice la desigualdad en el acceso a la vivienda en un país donde el déficit habitacional sigue siendo estructural.
