Hace algunos días despedimos con mucho amor y nostalgia a nuestro querido Ángel, un pequeño gran luchador que luego de más de 90 días en el área de Neonatología pudo regresar a su hogar junto a su familia.
Fueron meses de días buenos y otros difíciles, de alegría e incertidumbre, de avances y desafíos. Pero por sobre todo, fueron días de entrega, esperanza y amor compartido. Hoy celebramos su alta con una profunda emoción, sabiendo que cada paso en su recuperación fue acompañado por el compromiso incondicional de sus papás, siempre presentes, atentos y firmes.
Desde todo el equipo de Neonatología queremos expresar nuestro más sincero agradecimiento por la confianza depositada en nosotros, por el respeto mutuo y por ser parte esencial de este proceso. Nos quedamos con el recuerdo de una lucha que conmovió y unió a todos, y con el deseo de que la vida de Ángel esté llena de salud, felicidad y amor.
Gracias por permitirnos ser parte de esta historia.
