El periodista lanzó una versión que sacudió el tablero político: Schiaretti reemplazaría a Martín Menem a fin de año. El anticipo generó especulaciones sobre acuerdos de gobernabilidad y reacomodamientos en la cúpula del poder.
El conductor y periodista Alejandro Fantino sorprendió a su audiencia y a su colega Jorge Rial al anticipar, en una reciente emisión del programa Cónclave por Carnaval Stream, que el exgobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, sería el próximo presidente de la Cámara de Diputados. La versión, que implicaría el desplazamiento de Martín Menem tras las elecciones legislativas del 26 de octubre, se instaló rápidamente en la agenda política y mediática.
Fantino reconoció que la información le había sido “contada hoy” y admitió que podía tratarse de un “humo”. Sin embargo, su seguridad al nombrar a Schiaretti como el eventual reemplazo de Menem alimentó conjeturas sobre negociaciones avanzadas. “A fin de año hay nuevo presidente de la Cámara”, insistió Fantino. Ante la repregunta de Rial, agregó que Cristian Ritondo aparecía en danza, pero que la opción más fuerte era Schiaretti.
El comentario desató un ida y vuelta con Rial, quien planteó: “¿Por qué nuevo presidente, si tienen presidente?”. La respuesta de Fantino no dejó margen de duda sobre el rumor que quiso instalar: “Se cambia a fin de año”.
REORDENAMIENTOS EN EL PODER
La posibilidad de que Schiaretti asuma un rol central en Diputados se enmarca en un escenario de continuos cambios dentro del oficialismo y el Congreso. En los últimos meses, el Gobierno nacional reestructuró áreas claves, como la disolución de la Secretaría de Prensa y la redefinición de la Jefatura de Gabinete, movimientos que revelan una estrategia de Milei para reforzar su capacidad de maniobra ante un Parlamento adverso.
En mayo de este año, la salida de Nicolás Posse y la llegada de Guillermo Francos a la Jefatura de Gabinete ya había marcado un punto de inflexión en la dinámica interna. La eventual designación de Schiaretti se leería, en ese mismo sentido, como un gesto de apertura hacia dirigentes con experiencia y peso territorial.
UN “PUENTE” ENTRE BLOQUES
Juan Schiaretti, con una extensa trayectoria como gobernador de Córdoba, aparece como un nombre capaz de tender puentes entre fuerzas opositoras y oficialistas. Su figura encarna un perfil negociador que podría garantizar acuerdos en un Congreso fragmentado, donde Milei no cuenta con mayoría propia.
Analistas políticos sostienen que la instalación de Schiaretti al frente de la Cámara baja sería una jugada estratégica para fortalecer la gobernabilidad y, al mismo tiempo, ampliar la base de sustentación parlamentaria del oficialismo.
ENTRE EL RUMOR Y LA REALIDAD
Lo cierto es que, hasta ahora, no hubo confirmaciones oficiales. El anticipo de Fantino podría responder tanto a datos de pasillo como a movimientos reales en curso. La incógnita gira en torno a cuatro puntos centrales:
1. Si existen negociaciones avanzadas entre el oficialismo y Schiaretti.
2. Cuáles bloques respaldarían la designación.
3. Si la transición se concretaría efectivamente a fin de año.
4. Qué impacto tendría este cambio en la dinámica legislativa y en la agenda de reformas del Gobierno.
Más allá de su veracidad inmediata, el comentario de Fantino vuelve a poner en evidencia cómo el periodismo y el espectáculo mediático se cruzan con la política, instalando versiones que, ciertas o no, obligan a los actores de poder a posicionarse.