La abogada y amiga de Wanda analizó la actitud del futbolista y apuntó también contra la actriz.
Ana Rosenfeld volvió a referirse al conflicto que involucra a Mauro Icardi y la China Suárez, y lo hizo desde su relación de muchos años con el delantero. Aseguró que “lo que está haciendo lo hace por bronca, por resentimiento, por despecho”, marcando que conoce su carácter y que interpreta sus movimientos como intentos de provocar a Wanda. Incluso sostuvo que el jugador “guiona situaciones para que ella se enoje, pero no lo logra”.
La abogada también fue directa respecto a la China Suárez. Al analizar el vínculo y el episodio que dio inicio al escándalo, calificó la situación como “infidelidad e hipocresía”, al mencionar viajes, encuentros y acuerdos silenciosos que, según ella, exponen la naturaleza del vínculo. Su postura reforzó la idea de un conflicto en el que se mezclan emociones, celos y actitudes que mantienen viva la tensión mediática.
En paralelo, Rosenfeld volvió a cuestionar la estrategia legal de Icardi sobre la cuota alimentaria. Afirmó que cuando existe una orden judicial, “hay que cumplirla, hay que pagarla”, rechazando cualquier intento de justificar la deuda con bienes o propiedades. Para ella, la solución es simple: embargar directamente la cuenta bancaria del futbolista, donde se acreditan sus ingresos. Remarcó además que los derechos de los hijos no pueden compensarse con otros reclamos económicos: “El alimento es para los chicos”.
Con declaraciones firmes y sin rodeos, Rosenfeld volvió a instalar su voz en un conflicto que parece no perder vigencia y que mantiene a sus protagonistas bajo la lupa pública.
