El cantante explicó el origen de las versiones y habló de su vínculo actual con la madre de su hija.
L-Gante volvió a aparecer públicamente y no esquivó las especulaciones que lo vinculaban nuevamente con Tamara Báez. El artista aclaró que la imagen que encendió los rumores fue fruto de un momento cotidiano con su hija Jamaica: “Estábamos jugando en una cama, le presté el teléfono y Tamara subió una historia desde ahí. Ahí empezaron los mensajes preguntando si volvimos”, contó.
Explicó que la publicación fue un chiste interno y que la situación se malinterpretó: “Creo que puso algo de que me extrañaba. Nos reímos. Después ella volvió con su pareja. Todo normal, sin faltar el respeto”. También reconoció que a Tamara no le cayó bien la repercusión: la historia se viralizó justo cuando atravesaban un conflicto por la cuota alimentaria.
El músico recordó que en ese período incluso enfrentó restricciones judiciales. “No podía viajar, tenía que resolver cosas con abogados. Fui a hablar porque no me contestaba y justo se había peleado con el novio. Fueron tres días de tensión”, relató.
En paralelo, habló de las dificultades que tuvo por problemas con su exmanager y del impacto emocional de los últimos años. Aun así, aseguró estar en una etapa más estable, trabajando en su segundo álbum y con presentaciones programadas en el exterior.
Sobre la posibilidad de sumarse a un reality culinario, no cerró la puerta: “Estoy abierto a escuchar cualquier propuesta”, dijo cuando surgió su nombre como reemplazo de un participante.
También se refirió al vínculo que mantiene con Wanda Nara, conductora del programa: “Terminamos bien. Cuando la necesite, sé que va a estar, y yo también. Es un vínculo sano”. Respecto al romance de ella con Martín Migueles, fue claro: “No me sorprende, no lo conocía, pero la veo bien”.
Calmo, directo y sin polémicas, L-Gante dejó en claro que su presente pasa por su música y por sostener una relación ordenada con la madre de su hija, lejos de cualquier reconciliación sentimental.
