El expresidente Alberto Fernández reapareció con fuertes declaraciones.
Alberto Fernández volvió a ocupar el centro de la escena pública con un mensaje que generó repercusión en distintos ámbitos políticos y judiciales. El ex mandatario reclamó que Julio De Vido acceda al beneficio de prisión domiciliaria, argumentando que “tiene razones sobradas” vinculadas a su edad, su estado de salud y a lo que consideró una condena “muy discutible”.
Durante su intervención también defendió a Cristina Fernández de Kirchner, señalando que existe un “ensañamiento político y judicial” que afecta a la ex presidenta y que, según él, requiere ser revisado con urgencia. Sus palabras reabrieron el debate sobre el funcionamiento institucional y la imparcialidad en los procesos judiciales de alto impacto público.
En un pasaje inesperado, Fernández elogió con énfasis al presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia, asegurando que es “el mejor dirigente del fútbol argentino en décadas” y valorando el rol que cumplió en los logros recientes y en la proyección internacional de la selección.
La reaparición del ex jefe de Estado despertó opiniones encontradas y volvió a encender discusiones que atraviesan el presente político del país.
