Tensión inesperada en la sesión de jura en la Cámara Alta.
La primera sesión formal del Senado dejó al descubierto una interna que sorprendió puertas adentro del oficialismo. Patricia Bullrich protagonizó un cruce con la presidenta del cuerpo, Victoria Villarruel, luego de que se le negara el uso de la palabra al cierre del acto protocolar.
Según relataron presentes, Bullrich intentó activar su micrófono desde la banca, pero el audio permaneció bloqueado. Al finalizar la ceremonia, la senadora se acercó a Villarruel y expresó su malestar en tono firme.
“Le pedí que sea pareja para todos”, afirmó tras retirarse del recinto, en referencia a la aplicación desigual del reglamento sobre la cantidad de invitados permitidos para cada legislador.
La molestia se originó cuando Bullrich advirtió que algunos senadores ingresaron con más acompañantes de los permitidos sin que hubiera advertencia ni sanción. “Si vamos a comenzar una nueva etapa, tiene que ser con reglas claras y para todos por igual”, reclamó después del episodio.
El intercambio generó sorpresa entre los legisladores presentes, que consideraron que el gesto dejó expuestas diferencias internas en un momento clave para la construcción de consensos.
El episodio abrió interrogantes sobre el vínculo político entre dos figuras centrales de la nueva etapa legislativa y marcó un antecedente que podría anticipar tensiones futuras en el Senado.
