La crisis financiera abre un escenario de máxima tensión y amenaza con un colapso en servicios esenciales.
Kicillof advirtió que, sin la aprobación urgente del paquete de endeudamiento solicitado a la Legislatura, “se pone en riesgo el funcionamiento del Estado y el pago del aguinaldo de diciembre”, señalando que la falta de recursos impactará directamente en salarios, prestaciones y transferencias destinadas a los municipios bonaerenses.
La preocupación crece entre intendentes y trabajadores del sector público, que observan con alarma la posibilidad de un corte inmediato en los envíos de fondos necesarios para sostener el funcionamiento cotidiano y la estructura administrativa de cada distrito.
Según expresó el mandatario provincial, si no se alcanzan los votos necesarios para aprobar la deuda, “no habrá fondos suficientes para cumplir con obligaciones impostergables”, lo que afectaría áreas críticas como salud, educación, seguridad y políticas sociales.
Organizaciones gremiales y sociales alertaron que un escenario sin financiamiento derivaría en “menos alimentos en los barrios, menos medicamentos para los jubilados y menos apoyo para las familias más vulnerables”, reflejando el impacto social que podría desencadenarse en las próximas semanas.
Con negociaciones abiertas y sin definiciones concretas, la incertidumbre atraviesa a todo el territorio bonaerense, donde cada municipio espera una resolución inmediata para evitar un colapso administrativo y social de magnitud.
