La tensión crece en Villa La Angostura ante la inminente orden judicial.
La comunidad Paicil Antriao volvió a desafiar la decisión de la Justicia y aseguró que “no se moverá del territorio”, incluso frente al inminente operativo de desalojo. La medida ordena liberar un predio a orillas del Lago Correntoso, ocupado desde 2011 y reclamado por sus dueños legítimos.
El fallo establece un plazo breve para abandonar el lugar, pero los referentes de la comunidad advirtieron que “defenderán la zona como lo hicieron siempre”, acusando a las autoridades provinciales de “desconocer sus derechos y favorecer intereses inmobiliarios”.
El conflicto escaló luego de que se ratificara que los reclamos de ancestralidad no cuentan con respaldo legal. Aun así, Paicil Antriao insiste en que el relevamiento territorial pendiente “debe completarse antes de cualquier intervención”, al tiempo que responsabilizan al gobierno por las consecuencias de ejecutar el desalojo.
Mientras se evalúa cómo avanzar sin que estalle un nuevo enfrentamiento, el clima en la zona es cada vez más incierto y todos esperan una resolución que todavía parece lejana.