La ministra de Seguridad avanza en el armado político dentro de la Cámara alta.
Patricia Bullrich tomó un rol central en la conducción parlamentaria del espacio libertario y busca consolidar una estrategia unificada dentro del Senado para sostener la agenda legislativa del gobierno.
Desembarcó con su equipo político y técnico para fortalecer el control interno del bloque y ordenar decisiones en momentos clave.
Según señalan referentes internos, Bullrich asumió personalmente la coordinación en la Comisión de Asuntos Constitucionales, un espacio decisivo donde se definen impugnaciones, acreditaciones y cuestiones institucionales sensibles.
En ese ámbito protagonizó la defensa de la senadora electa Lorena Villaverde, quien enfrenta cuestionamientos por una causa internacional. Desde el bloque remarcan que “fue Bullrich quien definió la línea de acción y pidió sostener la banca con firmeza y legitimidad parlamentaria”.
A la par, impulsó objeciones contra Martín Soria y Jorge Capitanich, ambos electos por el peronismo, en una señal de disputa directa por el control político dentro de la Cámara alta. Voces libertarias afirman que “la estrategia apunta a garantizar que el Senado acompañe las reformas sin fracturas internas”.
El desembarco de su equipo asesor marca una reorganización profunda del funcionamiento parlamentario, con seguimiento permanente de cada instancia jurídica y política. Para el oficialismo, “la disciplina y el orden serán claves para avanzar en la transformación prometida”.
El movimiento confirma a Bullrich como figura de peso dentro del andamiaje legislativo y protagonista en la pulseada política que atraviesa al Senado.
