El DT ajusta detalles y espera por la recuperación de varios lesionados para visitar el Cilindro.
Marcelo Gallardo comienza a perfilar el equipo que River presentará en su visita al Cilindro de Avellaneda por los octavos de final del Torneo Clausura. El entrenador sigue de cerca la evolución de sus futbolistas y mantiene dudas clave en la defensa y en el mediocampo de cara a un partido que definirá el futuro inmediato del equipo.
La principal incógnita pasa por Gonzalo Montiel, quien sufrió un esguince de rodilla pero cuya respuesta en la última semana generó optimismo: desde el cuerpo médico aseguran que “respondió realmente muy bien” y que están “muy conformes con su evolución”. Gallardo lo esperará hasta último momento, ya que la lesión de Fabricio Bustos dejó al lateral derecho sin alternativas naturales. En caso de que no llegue, Agustín Obregón podría tener su primera titularidad, mientras Sebastián Boselli aparece como opción más experimentada.
Otro que trabaja contrarreloj es Lucas Martínez Quarta, con un golpe en la rodilla que lo mantuvo entre algodones, aunque todo indica que será parte del once inicial. Quien sí quedó al margen es Facundo Colidio, que no se recuperó a tiempo y no fue convocado. Su ausencia abre el camino para un ataque conformado por Sebastián Driussi y Maxi Salas.
Entre las buenas noticias para el DT aparece el regreso de Kevin Castaño, tras su paso por la Selección de Colombia, y la competencia interna entre Giuliano Galoppo y Santiago Lencina, que disputan un lugar en el mediocampo. En la lista de concentrados también sorprendió la ausencia de Miguel Borja y Paulo Díaz, nuevamente marginados del banco.
Con el plantel enfocado y la necesidad de meterse entre los ocho mejores del campeonato, Gallardo afina los últimos detalles para un clásico que, además de historia, puede marcar un punto de inflexión en el cierre del año.
Posible formación: Armani; Montiel u Obregón, Martínez Quarta, Rivero, Acuña; Castaño, Enzo Pérez, Galoppo o Lencina, Juanfer Quintero; Driussi y Salas.
