La irrupción de la inteligencia artificial (IA) está transformando el ámbito laboral, situando al área de Recursos Humanos (RR.HH.) en el centro de una revolución que exige nuevas habilidades, ética en la gestión de datos y una sinergia efectiva entre tecnología y personas.
La inteligencia artificial ha dejado de ser una promesa futura para convertirse en una realidad que está reconfigurando el mundo del trabajo. En este contexto, el área de Recursos Humanos (RR.HH.) se posiciona como un actor clave en la adaptación y liderazgo de las organizaciones frente a estos cambios.
Yaz García, CEO de la Fundación Conocimiento Abierto, destaca que “estamos frente a un cambio de paradigma que une lo humano con lo tecnológico”. Para García, RR.HH. debe liderar este proceso, ya que “el cambio también es humano, por eso es crucial que el área de talento acompañe la transformación digital” .
La adopción de la IA en los procesos de RR.HH. no solo implica la automatización de tareas repetitivas, sino también la necesidad de desarrollar nuevas competencias. Un estudio conjunto de Microsoft y LinkedIn revela que el 66% de los directivos no contrataría a alguien que no sepa usar inteligencia artificial, y el 71% prioriza habilidades en IA por sobre la experiencia .
Luis Sanz, vicepresidente de IBM Consulting para España, Portugal, Grecia e Israel, enfatiza que “el uso de agentes de IA no es una opción; el que tarde en adoptarlos tendrá un problema de competitividad”. Sanz señala que el mercado global de IA puede generar más de 3,8 billones de euros en productividad esta década, y advierte que no adoptar esta tecnología comprometerá la competitividad .
Sin embargo, la implementación de la IA en RR.HH. también plantea desafíos éticos y de privacidad. La recopilación y análisis de grandes cantidades de datos personales requiere medidas adecuadas para mitigar los sesgos y asegurar la equidad en el trato a los empleados .
Además, la IA puede ser una herramienta poderosa para promover la igualdad y la diversidad en el entorno laboral. Aplicada adecuadamente, puede eliminar sesgos en procesos de selección, fomentar liderazgos inclusivos y facilitar la inclusión de personas con discapacidad, así como promover la diversidad étnica y cultural .
En este escenario, RR.HH. debe asumir un rol proactivo, liderando la transformación digital con una visión centrada en las personas, promoviendo la formación continua y asegurando una implementación ética y responsable de la inteligencia artificial en el ámbito laboral.