4 noviembre, 2025 6:03 am

MILEI ACEPTA LA RENUNCIA DE ESPERT: “GARANTIZAR EL CAMBIO ES MÁS IMPORTANTE QUE CUALQUIERA DE NOSOTROS”

El presidente Javier Milei confirmó que aceptó la renuncia “indeclinable” de José Luis Espert como cabeza de lista de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires. En su mensaje, defendió que el proceso de transformación política debe prevalecer sobre los intereses personales, mientras el escándalo que rodeaba al economista golpea la imagen oficialista a pocas semanas de los comicios legislativos.

El domingo por la noche, Javier Milei comunicó que había aceptado la renuncia de José Luis Espert como su candidato en la provincia de Buenos Aires, calificándola de “gesto indeclinable” y reiterando que “la Argentina siempre está por encima de las personas”.

Desde su cuenta en la red social X, el presidente afirmó:

> “Garantizar el cambio es más importante que cualquiera de nosotros. Aunque nos quieran ensuciar, no somos lo mismo. La Libertad Avanza o Argentina retrocede.”

La decisión llega tras una crisis política desatada por la denuncia de que Espert habría recibido en 2020 un pago de 200.000 dólares vinculado a Federico “Fred” Machado, empresario acusado en EE. UU. por narcotráfico y lavado de dinero.

Las repercusiones no tardaron: a lo largo de esta semana se intensificaron los pedidos internos de que Espert se apartara, alegando que su permanencia podría desalentar votantes moderados y afectar el relato de limpieza que el oficialismo busca sostener.

A pesar de aceptar la renuncia, Milei subrayó que no dudaba de la honorabilidad del ahora ex candidato. Aseguró que la salida fue una decisión personal de Espert, marcada por la dificultad de sostener una campaña en medio de semejante contienda política.

El mandatario también apuntó contra la oposición y los medios, al calificar todo el episodio como una operación montada con fines electorales. Acusó al “socialismo del siglo XXI” de emplear esas tácticas y se mostró confiado en que la estrategia no deteriorará el bloque oficialista.

En paralelo al caso Espert, surgió una serie de señales que apuntan a un ambiente político más agitado:

Este lunes, se conoció que Espert formalizó su retiro de la contienda electoral del 26 de octubre, dejando al oficialismo en pleno reajuste de cara a las listas.

En medio de la turbulencia, el gobierno de Milei esboza gestos de pragmatismo para recomponer apoyos y evitar que el desgaste judicial y mediático se traslade a la campaña.

En paralelo, circulan versiones de que Diego Santilli podría ocupar el lugar vacante en la boleta bonaerense como nuevo cabeza de lista.

El golpe reputacional llega en un momento sensible: con las elecciones legislativas a pocas semanas, el oficialismo no solo juega por retener el poder simbólico del cambio, sino por ganar espacio en el Congreso para sus reformas. La renuncia de Espert pone a prueba esa estrategia, al tiempo que abre interrogantes sobre hasta qué punto la campaña podrá aislarse del escándalo.

Contexto y desafíos

José Luis Espert había sido designado como candidato por su cercanía a las ideas liberales promovidas por el oficialismo y su discurso de renovación. Su caída anticipada pone en evidencia la fragilidad del armado electoral del Gobierno, y la volatilidad que puede generar la exposición judicial de figuras aliadas.

La operación política y mediática que denuncian desde La Libertad Avanza no es aislada: en Argentina los comicios legislativos suelen venir acompañados de acusaciones cruzadas, filtraciones, escándalos judiciales y suspicacias. En este caso, el episodio toma mayor dimensión por involucrar un escenario de altos stakes para el oficialismo y una figura simbólica de su proyecto.

Para el Gobierno, el desafío será doble: evitar que el desistimiento de Espert quede asociado con una renuncia táctica o presión política, y rearmar rápidamente una lista con capacidad electoral en la provincia de Buenos Aires, donde concentra gran parte del electorado nacional.

La renuncia de un candidato central en el tramo final de la campaña no solo tensiona la logística y el mensaje, sino que plantea un test de credibilidad para un gobierno cuyo eje discursivo es el cambio profundo y la limpieza política. El oficialismo deberá demostrar que puede sostener ese relato incluso cuando el entorno se ve sacudido por denuncias de tal magnitud.

Compartir noticia
WhatsApp
Telegram

Dejá un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio